La escala de inseguridad imperante en todo el país no es ajena en la Ciudad de Buenos Aires. Las escuelas tienen un capítulo aparte y el GCBA trata de contenerla.
El gobierno porteño ha reconocido que mejorar la seguridad en las escuelas lleva tiempo, después de que se informara que ha habido 2.900 robos en los últimos años. Según las autoridades, el problema no radica en la falta de medidas de seguridad, sino en la necesidad de adaptarlas y revisarlas constantemente a medida que cambian las condiciones de seguridad.
Además, el gobierno ha señalado que se están implementando medidas para mejorar la seguridad en las escuelas, como la instalación de cámaras de seguridad y la creación de un equipo de vigilancia para cada escuela. Sin embargo, los críticos han argumentado que estas medidas son insuficientes y que se necesita una mayor inversión en seguridad para proteger a los estudiantes y al personal escolar.





